Hoy, 13 de marzo, la Iglesia celebra a:

by AdminObra
  1. Santos MACEDONIO, presbítero, PATRICIA, su esposa, y MODESTA, su hija. En Nicomedia. (s. inc.).
  2. San SABINO, mártir. En Hermópolis, Egipto. Después de varios suplicios fue arrojado al río. (s. IV).
  3. Santa CRISTINA, mártir. En Persia. Azotada con varas, en tiempos del rey Cosroes I. (559).
  4. San PIENTIO, obispo. En Poitiers. Ayudó a la Beata Radegunda en la fundación de cenobios. (s. VI).
  5. San ELDRADO, abad. Valle de Susa, Italia. Apasionado del culto divino, revisó el salterio y promovió la construcción de nuevas iglesias. (840).
  6. Santos RODRIGO, presbítero, y SALOMÓN, mártires. En Córdoba. El primero, al negarse a aceptar a Mahoma como el verdadero profeta, fue encarcelado. En el cautiverio conoció a Salomón, que algún tiempo antes había pertenecido a la religión mahometana. Fueron decapitados. (857).
  7. San ANSOVINO, obispo. En el Piceno, Italia. (868).
  8. Beato PEDRO II, abad. Campania. (1208).
  9. Beato AGNELO de PISA, presbítero. Oxford. Enviado por San Francisco a Francia y después a Inglaterra, estableció allí la Orden franciscana y promovió las Ciencias Sagradas. (1236).

Hoy recordamos especialmente a la Beata FRANCISCA TRÉHET

Françoise Tréhet nació el 8 de abril de 1756 en Saint-Mars-sur-la-Futaie, Mayenne, Francia, de familia propietaria de tierras. profesó en las Hermanas de la Caridad de Notre-Dame d’Evron, una congregación que había sido fundada en 1682 para la educación de las jóvenes y para el ejercicio de la caridad. Eran llamadas popularmente «pequeñas hermanas grises» por el color de su hábito. En 1783 había sido invitada a abrir una escuela parroquial en Saint-Pierre-des-Landes, un lugar cercano a la abadía donde estaba establecida la congregación.

Jeanne Véron nació en Quelaines, también en Mayenne, el 6 de agosto de 1766. Siendo joven, ingresó en la misma congregación de la beata Tréhet, y fue enviada, muy joven, a ayudar en la nueva fundación mencionada.

Las dos hermanas repartían sus tareas no sólo enseñando en la escuela, sino también atendiendo a los enfermos y desvalidos. Los maestros, incluso en escuelas parroquiales, eran empleados del estado, por lo que en la Revolución, les correspondía a las dos jurar fidelidad a la República, lo que implicaba, para el momento, rehusar fidelidad a la Iglesia. Esto ocurrió en 1791, y las dos hermanas se negaron a firmarlo, por lo que fueron despedidas.

Se dedicaron a la caridad, a la atención de pobres, huérfanos y enfermos. Entre estas tareas, acogieron y escondieron a sacerdotes perseguidos. Las dos fueron apresadas en febrero de 1794, con los cargos de rehusar obediencia a la República, y esconder sacerdotes rehusantes. La beata Tréhet afirmó que ella no podía negarse a atender a ningún enfermo, pero cuando se le pidió que vivara a la República, se negó, por lo que fue, junto con su compañera, condenada a muerte.

La beata Véron no fue a la cárcel en espera de la ejecución, sino que tuvo que ser hospitalizada, porque se encontraba gravemente enferma.

El 13 de marzo fue ejecutada Françoise Tréhet, de 37 años, y una semana más tarde, el 20, llevada en camilla, lo fue Jeanne Véron, de 27 años.