¿QUÉ ES EL DOMINGO “LAETARE”?

by AdminObra

El cuarto domingo de Cuaresma en el cual las oraciones de la misa hacen referencia a la alegría preparada y conquistada por Cristo a los hombres por la obra de la redención cercana y por la Nueva Jerusalén celestial que les ha manifestado, alejando por un momento la seriedad del tiempo de penitencia.

La expresión externa de estos sentimientos mitigados de penitencia se manifiesta al emplear la casulla y la dalmática (los diáconos) de color rosa, en lugar de la casulla morada y en el tocar del órgano, pues se permite algo más de musicalidad.

El nombre de este domingo IV de Cuaresma deriva de las primeras palabras contenidas en el Misal Romano al comienzo de la misa de este día.

En definitiva, se nos transmite que ya hemos traspasado el ecuador de la Cuaresma y que ya falta más para la llegada de la Pascua de Resurrección. Hay un trasfondo anímico que quiere ser de regocijo, y de motivación pues merece la pena apurar la penitencia para llegar purificados de nuestros pecados.

Tiene, este domingo, su unidad con otro domingo, el III de Adviento, que coincide en las manifestaciones externas (casulla rosa), y transmisión del mismo estado de ánimo y de motivación ascética, en este caso de cara a las Pascuas de la Navidad.