1.- ¿Qué es el Miércoles de Ceniza?
Es el día en el que comienza la Cuaresma. No es el día en el que acaba el Carnaval.
Siempre cae en miércoles (parece obvio, pero alguno duda todavía) y da igual que el año sea bisiesto porque se cuenta hacia atrás desde la Misa de la Cena del Señor.
En la Misa de este día se bendice y se impone la ceniza, hecha de los ramos de olivo o de otros árboles, bendecidos en el Domingo de Ramos del año precedente.
2.- ¿Dónde se compra la Ceniza?
En ningún sitio. Se obtiene de quemar los ramos bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior.
Muchas familias guardan los ramos o las palmas y los llevan a la parroquia los días previos.
3.- ¿Por qué se impone la ceniza?
Es un símbolo. El comienzo de los cuarenta días de penitencia, en el Rito romano, se caracteriza por el austero símbolo de las Cenizas, que distingue la Liturgia del Miércoles de Ceniza. Propio de los antiguos ritos con los que los pecadores convertidos se sometían a la penitencia canónica, el gesto de cubrirse con ceniza tiene el sentido de reconocer la propia fragilidad y mortalidad, que necesita ser redimida por la misericordia de Dios. Lejos de ser un gesto puramente exterior, la Iglesia lo ha conservado como signo de la actitud del corazón penitente que cada bautizado está llamado a asumir en el itinerario cuaresmal. Se debe ayudar a los fieles, que acuden en gran número a recibir la Ceniza, a que capten el significado interior que tiene este gesto, que abre a la conversión y al esfuerzo de la renovación pascual.
4.- ¿A quién se puede imponer?
No hace falta ser católico para que te impongan la ceniza. De hecho, muchos catecúmenos participan en la ceremonia en preparación para su bautismo el día/noche de Pascua de Resurrección.
Digamos que, en este sentido, es un «día de puertas abiertas»: creyente o no, niño, adolescente, maduro, mayor sin madurar o anciano. Todos. Los ateos también.
5.- ¿Cómo y cuándo se impone?
No hay reglas fijas. Depende del ámbito cultural y de las costumbres locales.
- En los países de tradición latina, las cenizas se imponen más hacia el pelo que en la frente, espolvoreando.
- En los países del ámbito anglosajón, con agua bendita se hace una pasta y se suele «marcar la frente».
Después de la homilía, el sacerdote bendice las cenizas y las rocía con agua bendita. Luego se impone con una de estas dos fórmulas:
- Conviértete y cree en el Evangelio. O,
- Recuerda que eres polvo y al polvo volverás.
6.- ¿Es obligatorio?, ¿es día de precepto?
No, no es obligatorio, y no, no es día de precepto. Aunque curiosamente sin «ser obligatorio» y siendo día laborable, suele aumentar considerablemente la asistencia a la Santa Misa ese día.
- – ¿Cuánto tiempo hay que tener la ceniza en la cabeza?
Lo que quieras. Los hay que se lo quitan al volver al banco, en especial señoras. Otros, como testimonio, esperan a que desaparezca naturalmente.
8.- ¿Hace falta que la imponga un sacerdote?
La bendición, como todo sacramental, sólo un sacerdote o un diácono. Para la imposición pueden ser ayudados por laicos.
Puede hacerse fuera de la celebración de la Misa:
La bendición e imposición de la ceniza puede hacerse también fuera de la Misa. En este caso es recomendable que preceda una liturgia de la palabra, utilizando la antífona de entrada, la oración colecta, las lecturas con sus cantos, como en la Misa. Sigue después la homilía y la bendición e imposición de la ceniza. El rito concluye con la oración universal, la bendición y la despedida.
9.- ¿Es obligatorio el ayuno y la abstinencia?
El Miércoles de Ceniza no hay obligación para los católicos de imponerse la ceniza, pero sí de hacer ayuno y abstinencia según las normas generales y las particulares de cada diócesis.
El ayuno es obligado, al igual que el Viernes Santo, a los mayores de 18 años y menores de 60. Fuera de los límites también se puede.
La abstinencia de comer carne es obligada desde los 14 años. Todos los viernes de Cuaresma también lo son de abstinencia obligatoria. Los demás viernes del año también, aunque según el país puede sustituirse por otro tipo de sacrificio/mortificación.