- San ANDRÉS, apóstol. Nació en Betsaida. Hermano de San Pedro. Pescador. Predicó el Evangelio en Acaya, en Grecia y fue crucificado en Patrás. (s. I).
- San MIROCLETO, obispo, en Milán. San Ambrosio hace memoria de su fidelidad. (314).
- San TUGDUAL, abad y obispo, en Bretaña Menor. Fundó un monasterio en Tréguier. (s. VI).
- San GÁLGANO GUIDOTTI, eremita, en la Toscana. Después de una juventud disipada y vivió el resto de su vida dedicado a la penitencia corporal. (1181).
- Beato JUAN VERCELLI GARBELLA, presbítero, en Montpellier. Maestro dominico, que predicó la veneración al Nombre de Jesús. (1283).
- Beato FEDERICO, religioso. En Ratisbona, de los Ermitaños de San Agustín. Siendo hábil carpintero, sobresalió por el fervor en la oración, por la obediencia y por la caridad. (1329).
- San CUTBERTO MAYNE, presbítero y mártir, en Lanceston, Inglaterra. Ejerció su ministerio en Cornualles, hasta que, bajo Isabel I, condenado a muerte por haber dado a conocer públicamente una Carta Apostólica, fue conducido al patíbulo. (1577).
- Beato ALEJANDRO CROS, presbítero y mártir, en York, siendo humilde costurero, fue ordenado presbítero, por lo que terminó en el patíbulo. (1586).
- San TADEO LIU RUITING, presbítero y mártir, en China. Estrangulado por los que odiaban la fe. (1823).
- San JOSÉ MARCHAND, presbítero y mártir. Misionero en Vietnam. Fue condenado al suplicio de los 100 azotes. (1835).
- Beato MIGUEL RUEDAS MEGÍAS, y SEIS COMPAÑEROS, mártires. En Paracuellos. Religiosos de San Juan de Dios. Fusilados durante la persecución religiosa en España. (1936).
- Beato JOSÉ OTÍN AGUILÉ, presbítero y mártir. Ejecutado en Valencia. (1936).
- Beato LUDOVICO ROQUE GIENTYNGIER, presbítero y mártir, en Munich. En el campo de concentración de Dachau. (1941).
Hoy recordamos especialmente a BEATO MIGUEL RUEDAS MEGÍAS, y COMPAÑEROS
Sus nombres son: beatos Diego de Cádiz (Santiago) García Molina, Nicéforo Salvador del Río, Román (Rafael) Touceda Fernández, religiosos; Arturo Donoso Murillo, Jesús Gesta de Piquer y Antonio Martínez Gil-Leonis, profesos.
Miguel nació en Motril (Granada), en el seno de una familia humilde. Venciendo la fuerte oposición familiar, en 1922, ingresó en la Orden Hospitalaria. Era de genio fuerte, pero se venció a sí mismo, manifestándose frecuentemente blando, sentimental y de alma delicada. Formó parte de varias comunidades hospitalarias del territorio español.
Formaba parte de la comunidad de Ciempozuelos cuando fue detenido. Durante los meses de su encierro demostró gran fortaleza. Ante su martirio, «diríase que iba a algún acto de comunidad a juzgar por su contento». Mártir en Paracuellos del Jarama (Madrid).