La festividad de Nuestra Señora del Pilar se celebra el 12 de octubre, lo que llama la atención debido a que la aparición de la Virgen al apóstol Santiago al 2 de enero del año 40. No hay que olvidar que Colón llegó a América un 12 de octubre abriéndose así una de las mayores evangelizaciones de la historia que acabó llevando la fe católica a todo un continente.
Desde ese momento, la devoción a la Virgen del Pilar traspasó las fronteras peninsulares y llegó a lo que pronto se convertirían en millones de nuevos católicos. También explica la rápida extensión de su popularidad el milagro de Calanda, según el cual, en 1640, Miguel Juan Pellicer sufrió una milagrosa restauración de su pierna amputada por intercesión de la Virgen del Pilar.
José María Bordetas, capellán de la Virgen del Pilar y encargado del cuidado de la icónica imagen de la Virgen de Zaragoza desde hace seis décadas, mencionó que fue en el siglo XVIII cuando comenzó a ser venerada popularmente como patrona de los pueblos hispanoamericanos a raíz precisamente de la labor evangelizadora española.
Debido a la realización de uno de los mayores acontecimientos apostólicos y evangelizadores de la historia y la rápida extensión de la devoción a la Virgen del Pilar, el Papa Clemente XII (pontífice entre 1730 y 1740) sería el primero de muchos Papas en decretar oficialmente la fecha del 12 de octubre como festividad particular de esta advocación.