MES DE LA VIRGEN MARÍA CON Benedicto XVI – 23

by AdminObra

“Abramos nuestro corazón; acojamos esa herencia tan valiosa. Entonces podremos entonar, juntamente con María, el himno de alabanza de su gracia. Y si seguimos poniendo nuestras preocupaciones diarias ante la Madre inmaculada de Cristo, ella nos ayudará a abrir siempre nuestras pequeñas esperanzas hacia la esperanza grande y verdadera, que da sentido a nuestra vida y puede colmarnos de una alegría profunda e indestructible”.