LA RESURRECCIÓN DE CRISTO – 16

by AdminObra

Hemos de entender que si los evangelistas comunican lo que ha sucedido se debe a que esos sucesos están llenos de significado, de valor salvífico para la vida de los hombres.

Pero el significado, el sentido teológico del relato no niega su dimensión histórica, sino la presupone.

Fiarse de su testimonio, por tanto, no es una posición ingenua y acrítica. En realidad, si no hay motivos fundados para dudar de la fiabilidad del testigo, es necesario darle crédito. Optar como principio de conocimiento la sospecha o la desconfianza respecto a un testigo sería signo de locura o maldad; en absoluto una actitud razonable.

Por ello, la posición razonable ante la narración evangélica no es la duda, característica de la crítica moderna, sino la confianza.