Hoy, 9 de febrero, la Iglesia celebra a:

by AdminObra
  1. Santa APOLONIA, virgen y mártir. En Alejandría de Egipto. Tras sufrir crueles tormentos por parte perseguidores, para no verse obligada a proferir palabras impías, prefirió tirarse al fuego antes de renunciar a la fe. (250).
  2. Numerosos SANTOS MÁRTIRES. En Alejandría de Egipto. Que durante la celebración de la Eucaristía fueron asesinados de distintos modos por los arrianos. (s. IV).
  3. Santos PRIMO y DONATO, diáconos y mártires. En Argelia actual. Por defender el altar de la Iglesia murieron a manos de herejes. (361).
  4. San MARÓN, eremita. En Siria. Tras una vida de penitencia e intensa piedad falleció, en cuyo lugar se levantó un monasterio que lleva su nombre. (423).
  5. San TELIAVO, obispo y abad. En Cambrai, Reino Unido. Cuyos esfuerzos pastorales son recordados por muchas iglesias locales. (560).
  6. San SABINO, obispo. En Canosa, Italia. Fue amigo de San Benito y legado de la Santa Sede en Constantinopla para defender la fe católica ante la herejía monofisita. (566).
  7. San ANSBERTO, abad y obispo. En Hainut, Francia. El cual, después de ser abad en Fontanelle, ocupó la sede episcopal de Rouen, y fue desterrado por el príncipe Pipino. (695).
  8. San ALTO, abad. En Baviera. Nacido en Irlanda. Fundó en los bosques de esta región el monasterio que lleva su nombre. (s. VIII).
  9. San REINALDO, obispo. En Umbría. Primero monje camaldulense, y una vez designado obispo mantuvo sus costumbres monásticas. (1222).
  10. San MIGUEL FEBRES CORDERO, religioso. En Barcelona. De las Escuelas Cristianas. Durante cuarenta años se dedicó a la educación en la ciudad de Cuenca, en Ecuador. Regresó a España, y se distinguió por la perfecta observancia de la disciplina de la vida religiosa. (1910).

Hoy destacamos al BEATO LEOPOLDO de ALPENDIERE.

Nació en Málaga en 1864.

En 1899 ingresó en la Orden de los Capuchinos y profesó en ella, en calidad de hermano, con el nombre de Fr. Leopoldo de Alpendiere.

Después de estar brevemente en varios conventos, fue destinado a Granada, en el que pasaría el resto de su vida, 42 años, con el oficio de hermano limosnero y dando ejemplo de caridad, humildad, de mansedumbre, de bondad.

Ya en vida gozó de gran fama de santo, como pudo percibirse en su entierro, al que acudieron miles de fieles. Murió en 1956.