Hoy, 29 de noviembre, la Iglesia celebra a:

by AdminObra
  1. San SATURNINO de CARTAGO, mártir, en Roma. Bajo el emperador Decio fue atormentado en el potro y después extraditado a Roma donde siguió siendo atormentado. Por su capacidad de sufrimiento ayudó a convertirse a Graciano, el torturador. Finalmente, fue decapitado. (257).
  2. San SATURNINO, obispo y mártir, en Toulouse. También, bajo Decio, fue detenido por los paganos en el Capitolio y arrastrado por las escaleras desde lo alto del edificio hasta que, destrozados la cabeza y el cuerpo, falleció. (250).
  3. San FILOMENO, mártir, en Ankara. Bajo la persecución de Aureliano, después de arrojarlo al fuego, le acribillaron manos, pies y cabeza con clavos. (s. III).
  4. Santa ILUMINADA, virgen, en Umbría. (320).
  5. San JACOBO, obispo, en Mesopotamía, Turquía. Que ilustró con su fe a esta Iglesia por medio de sus sermones, homilías y traducciones. (521).
  6. San RADBODO, obispo. Deventer, Frisia. Al frente de Utrech. Pastor docto y prudente. Murió visitando a los campesinos. (918).
  7. Beato EDUARDO BURDEN, presbítero y mártir, en York. Por regresar a Inglaterra, bajo Isabel I, después de ordenarse sacerdote en Francia, fue martirizado víctima de una turba enfurecida. (1588).
  8. Beatos JORGE ERRINGTON, GUILLERMO GIGSON, GUILLERMO KNIGHT, presbíteros y mártires. En York. Martirizados cruelmente. (1596).
  9. San FRANCISCO ANTONIO FASANI, presbítero. Apulia. Franciscano. Varón de exquisita doctrina, sumamente fundamentado en la escuela de la predicación y de la penitencia. Sirvió a pobres y necesitados, no dudó en despojare de sus vestidos para cubrir al mendigo. (1742).
  10. Beato ALFREDO SIMÓN COLOMINA, presbítero. En Valencia. Jesuita. Martirizado durante la persecución religiosa en España. (1936).

Hoy recordamos especialmente a los Beatos DIONISIO DE LA NATIVIDAD y REDENTO DE LA CRUZ

Pedro, el mayor de los diez hijos de la familia Berthelot, nació en Honfleur de Normandía, en 1600. A los diecinueve años, partió a las Indias orientales en el navío francés «Esperance», que fue capturado e incendiado por unos piratas holandeses. Pedro consiguió escapar en Java donde se dedicó a comerciar durante algunos años. Después ingresó en la marina portuguesa, en Malaca, y llegó a ser piloto y cartógrafo, y tomó parte en varias expediciones. En 1635, conoció en Goa al prior de los carmelitas descalzos e ingresó en dicha orden, en la que tomó el nombre de Dionisio. Poco después de su profesión, el virrey portugués pidió que pilotase la nave en que iba a enviar una embajada a Sumatra. Los superiores de Dionisio accedieron y le ordenaron sacerdote para que fuese también el capellán de la expedición.

Por compañero, le dieron a un hermano lego llamado Redento. Dicho hermano se llamaba antes de entrar en religión Tomás Rodríguez de Cunha, y había sido soldado en la India. En cuanto la expedición llegó a Achin (Koetaraja), los naturales tomaron presos al embajador y a toda su comitiva, y dieron muerte a muchos de ellos, entre los que se contaban los dos frailes. Dionisio fue condenado a ser pisoteado por los elefantes, por haberse negado a apostatar. Pero en vista de que los paquidermos no se decidían a pasarle por encima, los impacientes paganos le dieron muerte por la espada. Redento fue ejecutado algunos días después.