EL ADVIENTO y LOS SANTOS (San Gregorio Nacianceno – martes I)

El Hijo de Dios en persona, aquel que existe desde toda la eternidad, El mismo viene en ayuda de la criatura, que es su imagen: por amor del hombre se hace hombre, por amor a mi alma se une a un alma intelectual, para purificar a aquellos a quienes se ha hecho semejante, asumiendo todo lo humano, excepto el pecado. Siendo Dios, nació con la naturaleza humana que había asumido, y unió en su persona dos cosas entres sí contrarias, a saber, la carne y el espíritu, de las cuales una confirió la divinidad, otra la recibió.