DOMINGO DE LAS ROSAS

by AdminObra

En la antigüedad, los cristianos acostumbraban a obsequiarse rosas. Y de esa costumbre derivó la “Rosa de oro”, allá por el siglo X.

Esto consistía en que el Papa, en el IV Domingo de Cuaresma, iba del Palacio de Letrán a la Basílica Estacional de la Santa Cruz de Jerusalén, llevando en la mano izquierda una rosa de oro que significaba la alegría por la próxima Pascua. Con la mano derecha bendecía a la multitud.

Con el tiempo, la “Rosa de oro” se ofrecería a autoridades y dignidades que mantenían buena relación con la Santa Sede.

Fue creada por el Papa León IX, en 1049, y consiste en un rosal de oro con flores, botones y hojas, colocado en un vaso de plata en un estuche de oropel con el escudo papal.

La rosa es bendecida el IV Domingo de Cuaresma, ungida con el Santo Crisma y se la inciensa, de modo que es un sacramental.