CONSAGRACIÓN A LA VIRGEN MARÍA CON SAN LUIS MARÍA GRIGNION DE MONTFORT. MES DE MAYO – 30

Si el Espíritu Santo ha plantado el verdadero Árbol de la Vida que es la devoción explicada estos días, has de poner todo cuidado en cultivarle para que dé fruto a su tiempo.

Es esta devoción el grano de mostaza de que habla el Evangelio, que siendo, al parecer, el más pequeño de los granos, llega, sin embargo, a ser muy grande: y tan alto sube su tallo, que las aves del cielo, es decir, los predestinados, anidan en sus ramas y en el calor del sol reposan a su sombra y en él se guarecen de las fieras.