CUARTA PARTE
CAPÍTULO III
IGLESIA Y ESTADO
Relaciones entre Iglesia y Estado
- ¿En qué deben basarse las relaciones entre Iglesia y el Estado?
Las relaciones entre la Iglesia y el Estado deben basarse no en la separación que implique desconocimiento e inclusive hostilidad, sino en la independencia que proclama respeto a la libertad y autonomía de cada institución, en un espíritu de colaboración mutua.
- ¿Qué extremos deben evitarse en las relaciones entre Iglesia y Estado?
En las relaciones entre la Iglesia y el Estado deben evitarse tanto en el extremo de relegar la religión al ámbito privado, como el otro extremo de imponer coactivamente la fe cristiana a todos los ciudadanos. Pero el ideal de la sociedad es que todos los hombres pertenezcan, libremente, a la verdadera Iglesia.
- ¿La misión de la Iglesia y el Estado son exclusivas?
La misión de la Iglesia y el Estado no son exclusivas, porque corresponde a la Iglesia proclamar los principios morales del orden social para promover la mejor calidad de sus hijos y hacerlos buenos ciudadanos, denunciando en consecuencia los abusos y las injusticias sociales; como corresponde al Estado proclamar su respeto a los valores espirituales de orden religioso, y garantizar los derechos de los ciudadanos para que libremente puedan realizarse como hijos de Dios.