COMIENZA LA NOVENA EN HONOR A SAN LORENZO

by AdminObra

Diácono y mártir en la persecución de Decio (III a.C.).

Tras repartir los tesoros de la Iglesia entre los pobres, les son reclamados por la autoridad civil.

Al no poder entregárselos, es atrozmente martirizado: flagelado con varas, quemadas sus costillas con hierros, y, por último, asado en una parrilla.

Hasta el siglo XVI, se le tributa un culto local en Aragón, de donde es oriundo.

Tras la victoria de San Quintín, en su día, es convertido en un santo nacional.

Su iconografía lo suele representar joven, tonsurado, con dalmática y portando un libro, la palma de la victoria, la cruz procesional, la bolsa de los bienes de la Iglesia y la parrilla.

Suele ser asociado a diáconos mártires como San Esteban o San Vicente.