Hoy inauguramos la Cuaresma, con el Miércoles de Ceniza el cual también da comienzo a la “Semana de Ceniza”.
Este tiempo quiere completar el número 40 para prepararse a la Pascual.
Si la Cuaresma empezara el Domingo I, como quiera que termina el Jueves Santo por la tarde, las cinco semanas enteras previas, más los cinco días de la Semana Santa (desde el Domingo de Ramos hasta el Jueves Santo a la tarde) ya sumarían el número 40 (35 +5).
Pero en un momento dado de la historia en el que se le empezó a dar un gran valor al ayuno, y teniendo presente que los domingos no se ayuna, había que “ganar” días para salvar la cifra 40.
Por eso el adelanto del inicio de la Cuaresma al miércoles anterior al Domingo I.
Así pues, estos días de “ceniza” los podemos considerar como un pórtico de la Cuaresma, un atrio de entrada que nos ayuda a dar el paso desde la vida cotidiana (y más si se le da grande prevalencia al carnaval) para asentarnos y tomar este tiempo fuerte de penitencia con intensidad.