ACERCAMIENTO AL CONCEPTO DE “HISPANIDAD”

by AdminObra

La Hispanidad, desde luego, no es una raza. Sólo podría aceptarse en el sentido de evidenciar que los españoles no damos importancia a la sangre, ni al color de la piel, porque lo que llamamos raza no está constituido por aquellas características que puedan transmitirse al través de las oscuridades protoplásmicas, sino por aquéllas otras que son luz del espíritu, como el HABLA y el CREDO. La Hispanidad está compuesta de hombres de las razas blanca, negra, india y malaya, y sus combinaciones, y sería absurdo buscar sus características pro los métodos de la etnografía.

También por los de la geografía. Sería perderse antes de echar a andar. La Hispanidad no habita una tierra, sino muchas y muy diversas. La variedad del territorio peninsular, con ser tan grande, es unidad si se compara con la del que habitan los pueblos hispánicos. (…). Los climas de la Hispanidad son los de todo el mundo. Y esta falta de características geográficas y etnográficas no deja de ser uno de los más decisivos caracteres de la Hispanidad. Por lo menos es posible afirmar, desde luego que la Hispanidad no es ningún producto natural, y que su espíritu no es el de una tierra, ni el de una raza determinada.

(…)

La civilización no es una aventura. Quiero decir que la comunidad de pueblos hispánicos no puede ser la de los viajeros de un barco que, después de haber convivido unos días, se despiden para no volver a verse. Y no es, en efecto. Todos ellos conservan un sentimiento de unidad, que no consiste tan sólo en hablar la misma lengua o en la comunidad del origen histórico, ni se expresa adecuadamente diciendo que es de solidaridad, porque por solidaridad entiende el diccinario una adhesión circunstancial a la causa de otros, y AQUÍ NO SE TRATA DE UNA ADHESIÓN CIRCUNSTANCIAL, SINO DE UNA COMUNIDAD PERMANENTE.

(“Defensa de la Hispanidad”, Ramiro de Maeztu).