Pero qué significa “padre”. Este término, como tantos, no es unívoco. De hecho, incluye diversos significados. Hasta diez acepciones según algunos diccionarios. Como estamos repasando la aplicación de este término a Jesucristo habría que saber qué se entendía por “padre” en el siglo XVII, y XVIII.
Los estudiosos dicen que se entendía “al que engendra o procrea a otro semejante en su especie”; o título que se da al cabeza de “alguna descendencia, familia o pueblo”, como pasó con Abraham; también se le llama así “al que favorece a otro, y hace las veces de padre”; o “la cabeza de la casa y familia, que la rige y gobierna, tenga o no hijos”.
Parece que la segunda acepción es la que más inspiró esta denominación.
También las familias de los religiosos dicen “nuestro padre San Francisco, Santo Domingo, San Ignacio…”.
Recordemos que también se le llama así a los sacerdotes y religiosos, contando con un significado muy específico el denominado “padre espiritual”.
Así pues, en el caso de Jesucristo, se le llama “padre” como una síntesis de todas ellas, pero sin confundir nunca con el título que se le refiere a la Primera Persona de la Trinidad Beatísima. Pero, al mismo tiempo, todo atributo divino que se aplica al Dios único es común a las tres personas divinas, pues todas participan de la Creación, de la Eternidad, de la Omnipotencia, de la Salvación.
Continuará…