BREVE HISTORIA DE LOS JUBILEOS ROMANOS – 83

El anodino jubileo de Pío VI – 1775

Efectivamente, el Papa Pío VI, el que muchos consideraban el “último” para siempre, fue hecho prisionero y desterrado por Napoleón en el final del siglo.

Pío VI confirmó la convocatoria del jubileo mediante la bula “Summo Dei”, que fue promulgada en italiano, por primera vez en la historia jubilar romana.

Pío VI abrió la Puerta Santa en febrero de 1775, poco después de su coronación.

El jubileo resultó anodino y gris como si intuyera los duros y lacerantes tiempos que aguardaban al Papa y a la Iglesia.

No constan datos totales de la participación, tan solo que 130000 peregrinos se albergaron en el Hospicio de la Trinidad, que eran la mitad de los que se esperaban.