¿QUIÉNES SON LOS COMBONIANOS?

by AdminObra

Según los archivos combonianos, la fecha indicada para marcar el inicio de este recorrdio, es el 1 de junio de 1867, el día en el que Daniel Comboni fundó y dio nombre a su instituto: “Instituto para las Misiones de la Nigrizia”.

Posteriormente, Mons. Luigi di Canossa, obispo de Verona, emitió el decreto de fundación.

Comboni se encontró en la necesidad un instituto propio, con la ayuda del obispo.

El lugar que marca el nacimiento y la primera etapa del recorrido comboniano a través de siglo y medio es Verona, en el norte de Italia. La primea sede del naciente Instituto pertenece a la Iglesia de San Pietro Incarnario.

Pero existe una segunda fecha que marca el nacimiento del Instituto Comboniano. La fecha que señala el sueño de Dios es el 15 de septiembre de 1864. El lugar es Roma, ante la tumba del apóstol San Pedro. La circunstancia es la “iluminación de lo alto” en la que Daniel Comboni, después de un periodo de intensa y prolongada oración, intuyó el plan para la regeneración de África.

Esta experiencia espiritual fue el momento decisivo que dio origen al Instituto, que se impondría a Comboni com un instrumento para realizar la regeneración de África

Los orígenes del camino comboniano son humildes: un padre y fundador, Daniel Comboni, misionero de África Central; un rector que muere prematuramente, Alejandro del Bosco; un pequeño grupo de miembros, entre los cuales algunos procedían de una institución religiosa disuelta. Todo ello no impide a Daniel Comboni ver el Instituto de Verona como la primera y más importante casa del vicariato de África Central.

En el mismo momento en que fundó el Instituto, crea la Obra del Buen Pastor, la asociación que motiva al pueblo de Dios a la regeneración de África.

Marcará a su Instituto con una identidad claramente misionera. Sueña para sus misioneros la santidad y la virtud de los consagrados como enderezada a la evangelización de África, siendo el sistema evangélico de la pobreza el más oportuno para formar apóstoles que va a ir al continente negro. Propone a los suyos un discipulado para la misión, nacida al pie de la Cruz, de la contemplación del Corazón de Jesús, dedicada a llevar a África la gracia y la fuerza transformadora del Evangelio.

El carisma recibido originariamente por San Daniel Comboni ha seguido iluminando, durante siglo y medio, a miles de hombres y mujeres. Vale la pena recordar que además de Instituto masculino, Comboni fundó también, el 1 de enero de 1872, las Misioneras Combonianas. Inspirados en él, surgirán en 1969, las Seculares Misioneras Combonianas, y, en 1991, los Laicos Misioneros Combonianos. Además, hay que recordar a tantos colaboradores, bienhechores, familiares y amigos que se han sentido fuertemente inspirados por Daniel Comboni.