57
La cultura de la civilización global del siglo XXI es postcristiana.
A ello contribuye de forma significativa la corriente de pensamiento del transhumanismo/posthumanismo, cuyo principal objetivo es eliminar toda trascendencia divina del hombre y, especialmente, la concepción cristiana de la persona.
Ante la ideología del transhumanismo y el globalitarismo, la nueva evangelización deberá poner especial énfasis en la preservación de la naturaleza humana y mirar especialmente a Dios Creador.
A modo de síntesis, la fe cristiana deberá hacer frente a los siguientes desafíos:
- El mejoramiento genético que eliminará el principio de igualdad.
- El mejoramiento psíquico-cognitivo que incluiría la opción de implantarse chips en el cuerpo y cerebro para pasar de la discapacidad o la capacidad común a la híper-capacidad.
- El mejoramiento del cuerpo con el uso extendido de nano-robots en nuestros órganos.
- El mejoramiento moral a través de fármacos y drogas.
- El mejoramiento afectivo a través de oxitocina y demás sustancias.
- La criogenización ‘post-mortem’ y ‘pre-mortem’, implementando la crio-eutanasia para poder curar el cuerpo y en el futuro.
- La aparición de entidades súper-inteligentes híbridas de hombres-inteligencia artificial.
- El trasvase sináptico-cerebral a un soporte material o memoria externa para poder recuperar la mente a voluntad.
- El advenimiento de la Singularidad tecnológica, momento en el que la inteligencia artificial superará la humana.