- Santos JUAN y FESTO, mártires. Roma. (s. inc.).
- San SIMPLICIO, obispo. Autun, Francia. Era noble. Vivió en perfecta castidad con su esposa, llena de virtud. Después fue elegido obispo. (375).
- San RUMOLDO, eremita y mártir. En Brabante. (775).
- San TEODULFO, obispo y abad. En Lobbes, Austrasia. (776).
- San GOARDO, obispo y mártir. Nantes. Cuando estaba celebrando Misa solemne con el pueblo en la catedral, fue blanco, junto con otros fieles de las flechas de los normandos. (843).
- San TEODGARO, presbítero. Vestervig, Dinamarca. Misionero en esta región, de quien se dice que construyó con madera la primera iglesia. (1065).
- San JOSÉ YUAN ZAIDE, presbítero y mártir. Sichuan, China. Estrangulado por quienes odiaban la fe cristiana. (1817).
Hoy recordamos especialmente a SANTA MARÍA de GUADALUPE GARCÍA ZAVALA
Nació en Jalisco en 1878. Su familia vendía objetos religiosos frente a la Basílica de Nuestra Señora.
Fue prometida en matrimonio. Pero sintió la llamada a la vida religiosa, y en especial, a la atención a los pobres.
Comunicó esta inquietud al P. Cipriano, que había tenido la misma idea, y entre ambos dieron origen a la Congregación de Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres.
Fue elegida Superiora General, cargo que ocupó toda su vida.
Ante las dificultades económicas para poder atender a los necesitados, no dudó en dedicarse a pedir limosna por las calles.
Se caracterizó siempre por su humildad, su bondad, su sencillez y el afán de servicio a los más necesitados.
En los años de persecución, Madre Lupita sobresalió con caridad con todos, incluso con los perseguidores, que llegaron a defender a las religiosas, lo mismo que a los enfermos.
La Congregación se extendió durante la vida de la fundadora, y lo mismo las actividades promovidas por ella tanto en México como fuera.
Falleció en 1963 en Guadalajara.