EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO – 19:30h

Consideración sacerdotal

“El sacerdote que hace de su vida una eucaristía continuada, una acción de gracias sin fin, puede vivir con mayor gozo y alegría, ya que reconoce que todo es don, y estos dones de Dios le llenan de júbilo, y a la vez la alegría le renueva incesantemente. Quien no agradece se queja, con el reproche de todos los días, dedicándose a ver no lo que tiene, sino lo que le falta. Quien agradece deja de lado lo que le falta y se fija y se goza en lo que ha recibido de parte de Dios. Así, el sacerdote movido por la gratitud podrá servir al Señor, como señala el salmo, con alegría. No con la queja de la insatisfacción, sino con la alegría propia del amor”.