El sacerdote de la Prelatura del Opus Dei, y experto moralista, D. Tomás Trigo, ha tenido a bien ofrecernos este librito que ha publicado Palabra en una colección de bolsillo que forma parte de la oferta bibliográfica de la editorial.
Este librito, que puede ser un buen subsidio para la oración personal en este tiempo de Cuaresma, y en el mes del Sagrado Corazón de Jesús, nos introduce en los sentimientos profundos del mismo Jesucristo por medio de las “palabras interiores” (sic) que Gabrielle Bossis, una mística francesa nacida en 1874 y fallecida en la noche del Corpus Christi de 1950, experimentó y reconoció en su interior provenientes del mismo Señor.
Gabrielle Bossis, que recibió una exquisita formación cristiana y cultural, que se diplomó en enfermería sirviendo en las misiones de Camerún y a los heridos de la Primera Guerra Mundial, ha sido agraciada con una rica vida interior y mortificada (dormía en el suelo envuelta en una manta).
Mujer de extraordinaria sensibilidad para todo. Pasó de una infancia tímida a todo lo contrario destacando por su jovialidad. Un ejemplo, fue la cantidad de obras de teatro que interpretó para transmitir alegría a todos los que la veían.
En 1936 ocurrirá algo en su vida. En un trasatlántico, hacia el Canadá, Jesús comienza a hablarle. Le pedirá que transcriba todo en un librito cuyo título le indicará “Lui et moi” (“Él y yo”). Estas “palabras interiores” no debemos confundirlas con apariciones ni con audiciones. Son “palabras”, o locuciones, que el Señor transmitirá para enseñarle a vivir en intimidad con El en medio de las ocupaciones de la vida normal y de sus trabajos como actriz.
Desde luego, merece la pena acercarse a la lectura de este libro delicioso para ganar, entre otros aspectos, en vida interior. Y en sencillez. Ojalá demos el paso para leer “Él y yo”.