8. MES DE JUNIO – TENDER AL FIN

by AdminObra

Buscar a Dios: es la consolación de nuestra meditación anterior; y es el fin hacia el cual deben tender nuestros esfuerzos.

No hemos sido arrojados al mundo solamente para trabajar, sufrir y morir. Tampoco para buscar bienes, fama o alegrías pasajeras. Sería insensato creer que no hay nada más que lo que vemos, aficionarnos a lo que pasa, poner en ello nuestro corazón, buscar en lo perecedero nuestros alimentos, nuestro descanso y fin último, porque todo eso no puede, ni de lejos, saciar nuestra sed de felicidad.

El verdadero y único fin que tenemos en esta vida es conocer a Dios, amarle y servirle, para luego gozarle por la eternidad. Nada más elemental, y sin embargo, nada más sublime; nada tan necesario y, no obstante, nada menos estudiado, menos comprendido y sobre todo menos practicado.

Con frecuencia, lo que nos preocupa, nos apasiona y nos atrae en esta vida, está muy lejos de este fin. Ante todo, buscamos honores; concedernos todo lo que nos apetece y agrada. Pero a lo mejor no es el verdadero fin.

Antes de decidir un proyecto o una acción cualquiera, preguntémonos si nos servirá para la eternidad. Detengámonos un instante para examinar si lo que estamos haciendo tiende a hacernos conocer, amar y servir a Dios.