Continuando con la teología de San Ireneo…
El santo nos enseña que la historia, el devenir de la Creación entera, es HISTORIA DE SALVACIÓN, es decir, el tiempo que Dios se toma para culminar el MODELADO de su criatura hasta la perfección de su semejanza con El.
Dice, además, que la historia es una ECONOMÍA. ¿Qué significa esto?
Significa que la historia es un plan pensado por Dios para salvar al hombre en su UNIDAD DE CARNE Y ESPÍRITU, un proceso movido en sus diversas etapas por la inspiración de un único Espíritu Santo.
Es el Espíritu Santo el que guía este proceso y el que lo da a conocer a los enviados de Dios, tanto en el Antiguo Testamento (los profetas), como en el Nuevo (los Apóstoles).
En el centro de este proceso está la ENCARNACIÓN del Verbo, momento en el que Dios “modela” al Adán nuevo y perfecto, a Jesucristo, que ha venido a RECAPITULAR en sí todo lo humano para llevarlo a plenitud.