Esta terminología tiene un interés histórico.
Se llaman libros PROTOCANÓNICOS a los que siempre y en todas las comunidades cristianas antiguas fueron considerados inspirados, sin que surgieran incertidumbres de algún peso.
Los libros DEUTEROCANÓNICOS son aquellos escritos bíblicos cuya inspiración y canonicidad fue puesta en duda en algunos períodos o en algunas comunidades cristianas; dudas que persistieron hasta que entraon a formar parte del canon de la Iglesia universal.
Los libros DEUTEROCANÓNICOS forman un total de 14 libros, 7 del Antiguo Testamento y 7 del Nuevo Testamento.
Al Antiguo Testamento pertenecen: TOBÍAS, JUDIT, 1 y 2 MACABEOS, BARUC (con la Carta de Jeremías), SIRÁCIDE y SABIDURÍA; al Nuevo Testamento, la Carta a los Hebreos, cinco carta católicas –SANTIAGO, 2PEDRO, 2 y 3 JUAN, JUDAS- y el APOCALIPSIS.
A estos libros hay que añadir tres pasajes del Antiguo Testamento: Est 10, 4-16, 24; Dn 3, 24-90 y Dn 13-14.
Los protestantes NO reconocen los DEUTEROCANÓNICOS del Antiguo Testamento. Los judíos tampoco (además de no admitir el Nuevo Testamento).